lunes, 31 de octubre de 2022

Reutilizar agua residual de la industria petrolera sería posible con novedosa técnica

 Más del 99 % de los aceites y grasas presentes en las aguas residuales producidas por pozos petroleros –y otras actividades derivadas de esta industria– se podrían eliminar por electrocoagulación, un método que con electricidad y metales como aluminio y acero inoxidable ataca las partículas contaminantes que estarían representando un riesgo para ríos y mares, y para la salud humana.

En la actualidad, el agua residual que se genera en la etapa de recuperación del petróleo (agua producida) es de alrededor de 10 millones de barriles por año, y menos del 1 % se reutiliza, lo cual es un desperdicio, ya que esta agua serviría tanto en procesos petroleros como en la agricultura, uno de los sectores que más necesita de este recurso, del que emplea cerca del 43 % del total del país.

Ante esta situación, Andrea Cubillos, estudiante de la Maestría en Ingeniería Ambiental de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), hizo un aporte en un proyecto más grande que adelantan en conjunto el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación y la Agencia Nacional de Hidrocarburos, en el que encontró que la técnica de electrocoagulación tiene el potencial de remover casi el 100 % de los aceites y grasas de esas aguas contaminadas.

Según la investigadora, se encontró que cuanto más tiempo de electrocoagulación y corriente se emplea, más eficiente es la remoción de contaminantes, y que el intervalo entre 4 y 6 minutos es el más efectivo. Después de ese momento ya no se produce un cambio significativo.

Lo anterior se comprobó dejando actuar el método por alrededor de 20 minutos, durante los cuales no hubo un incremento importante de remoción. A su vez, en una escala de 1 a 10, en el pH inicial, que varía durante el proceso, el grado en el que mejor funciona la electrocoagulación es entre 5 y 8.

Para la prueba se creó una simulación del agua residual de petróleo, mezclando en un recipiente: 1 litro de agua, unos 1.150 mg de aceite de motor de carro, sal de cocina y Tritón X, un tensoactivo no iónico que actúa como líquido emulsificante. Allí se introducen dos placas metálicas –una de aluminio y otra de acero inoxidable– de 20 cm de alto, aunque solo se sumergen 12 cm, que son suficientes para conducir la electricidad al agua.

Las láminas se conectan a dos electrodos: uno positivo (cátodo) para el aluminio y uno negativo (ánodo) para el acero inoxidable, los cuales a su vez están conectados a una fuente de poder que descarga corriente y voltaje sobre el recipiente con la mezcla.

La intensidad de la corriente aplicada oscila entre 0,5 y 3 amperios, el tiempo de electrocoagulación es de entre 1 y 20 minutos, y además se analizó la acidez o neutralidad del agua y la concentración de sal.


Mediante esta técnica –que es sostenible con el ambiente, fácil de usar y no produce olor– se genera una sustancia que permite la unión de las partículas presentes allí (coagulante), a  través de la oxidación de metales como el aluminio (formación de iones de metal), y la división del agua en gas hidrógeno e iones hidroxilos (gas hidrógeno e iones hidroxilos).

El coagulante entra a desestabilizar las cargas eléctricas de las partículas contaminantes presentes en el agua, las cuales se encuentran suspendidas, mezcladas o disueltas.

Dicho desequilibrio facilita que las moléculas busquen unirse formando agrupaciones fáciles de identificar y remover por medio de procesos como la filtración, similar al que se hace en la casa con un colador para hacer jugos.

“Debido a la dificultad para tener grandes muestras de petróleo y agua de producción, utilicé aceite de motor para preparar el agua residual sintética, que al ser un derivado de esta industria tiene un comportamiento similar, en cuanto a los ensayos y el comportamiento frente a la electrocoagulación, al petróleo”, explica la investigadora.

Añade que “estas condiciones, que funcionaron en el trabajo, varían según la composición del agua a tratar, la concentración inicial de grasas y aceites, y las interacciones entre contaminantes. La cantidad de aceite de motor utilizada es similar al promedio de aceites y grasas que se encuentra en las aguas de producción del país, pero sería importante evaluar otro tipo de concentraciones, para que el modelo sea más preciso”, indica.

Esta es la primera parte de una serie de investigaciones que se están realizando dentro del proyecto para que en un futuro se logre consolidar un tren de tratamiento de aguas residuales en el Magdalena Medio, en donde hay cerca de 7.404 pozos petroleros, lo cual representaría una ayuda para reutilizar el agua producto de esta industria y descontaminar los ríos aledaños.






martes, 25 de octubre de 2022

En marcha recuperación de humedales en Leticia

 Aunque los humedales albergan una amplia diversidad de especies de aves y peces, y otras vegetales como el canangucho (palma alta que cubre extensas áreas de los ríos Amazonas y Orinoco), la creciente contaminación por residuos sólidos o por el vertimiento de aguas residuales domésticas amenaza su futuro. La Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Amazonia y la comunidad del cabildo Tiwa buscan transformar la realidad de estos valiosos ecosistemas.

Aprovechando la Convocatoria Nacional de Extensión Solidaria 2022, enfocada en fortalecer la innovación social y armonizar las funciones misionales de la UNAL, la Sede Amazonia ha presentado el proyecto “Iniciativas locales para la recuperación de los humedales del cabildo Tiwa en Leticia, Amazonas”.

La iniciativa es liderada por la ingeniera ambiental María José Arias, de la UNAL Sede Medellín, quien para su trabajo de grado evaluó el estado de 16 humedales suburbanos de Leticia y cuyos resultados la hicieron merecedora del primer puesto en el concurso “Mejores trabajos de grado de pregrado 2022” de las diferentes carreras de la Institución.

“Con la iniciativa presentada se busca generar un insumo preliminar que sirva como base para construir un plan de manejo ambiental del territorio, para lo cual será necesario adelantar un diagnóstico ambiental y fortalecer el conocimiento tradicional, generando así una apropiación local del conocimiento entorno al agua y los humedales”, señala la ingeniera Arias

Para ello, con la comunidad del cabildo Tiwa, ubicado a 20 minutos de Leticia y conformado por 55 familias de las étnias murui, yucuna, tikuna, bora, inga, cubeo, tanimuka y miraña, se desarrollarán actividades comunitarias o mingas para abordar la importancia ambiental y social de cananguchales, ríos y quebradas, y también para realizar brigadas de limpieza de los ecosistemas acuáticos y dictar talleres de educación ambiental dirigidos especialmente a niños y jóvenes.

Contaminación y creciente urbanización, las amenazas de los humedales

Tras evaluar el estado de 16 humedales suburbanos de Leticia, la ingeniera ambiental Arias evidenció que 11 presentan estancamiento de la corriente de las aguas, debido en gran parte a la transformación de los ambientes acuáticos para actividades como la piscicultura.

También se evidenció que en 10 humedales ubicados dentro de la ciudad, el principal problema es la urbanización, ya que además de la construcción de viviendas, también se incrementa la existencia de infraestructura como vías, lo cual transforma los asentamientos humanos y la manera como se relacionan con estos ecosistemas.

Los resultados de este trabajo forman parte del proyecto “Apropiación ambiental y social de los humedales urbanos y suburbanos de Leticia”, una alianza entre los grupos de investigación en Limnología Amazónica –de la UNAL Sede Amazonia– y de Biodiversidad, Biotecnología y Conservación de Ecosistemas, de la UNAL Sede Bogotá.

Algunos datos recogidos en otras investigaciones del Grupo de Investigación en Limnología Amazónica muestran que en Leticia el 60 % de la basura está compuesta por residuos orgánicos, los cuales no se están aprovechando a pesar de las tantas tecnologías disponibles.

A los precarios servicios públicos se suman la falta de cultura para recolectar, disponer y ubicar la basura en los lugares donde corresponde. Los residuos líquidos se convierten en aguas servidas o cloacales que llegan a fuentes de agua como humedales, arroyos, quebradas y, en el caso local, al río Amazonas.

La situación identificada hasta el momento por los investigadores de la UNAL no dista mucho de lo hallado por el Instituto Sinchi en 2017 después de analizar 40 de los 77 humedales del Amazonas: el 17,5 % presentaba buena calidad del hábitat, el 32,5 % media, el 32,5 % moderada y el 17,5 % baja.

La ingeniera ambiental señala que “el desconocimiento de los humedales agrava su estado, lo cual afecta tanto a los ecosistemas como a las comunidades que se benefician de ellos para garantizar aspectos esenciales como el abastecimiento de agua o el acceso a alimentos”.

Por eso, con los integrantes del cabildo Tiwa se está recuperando el importante conocimiento que ellos tienen del canangunchal, un hábitat con una historia natural y climática de más de 4.000 años y que hoy es considerado como un elemento fundamental dentro de Leticia.

“Se pretende recuperar algunas de las funciones ecológicas más importantes que cumplen los humedales, entre ellas regulación, depuración y conservación, con el propósito primordial de mantener un abastecimiento de agua para consumo y recreación de esa población”, concluye la ingeniera Arias.







viernes, 21 de octubre de 2022

Una apuesta para mejorar la movilidad y cuidar el medioambiente

 Estudiantes de posgrados y del Programa Especial de Admisión y Movilidad Académica (Peama) recibieron bicicletas y elementos de seguridad para facilitar su movilidad al campus y sus alrededores. Con esta iniciativa también se busca fomentar hábitos saludables y el buen uso del tiempo libre.

Para algunos estudiantes llegar a la Sede Amazonia de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), ubicada frente a la pista de aterrizaje del Aeropuerto Internacional Alfredo Vásquez Cobo, en las afueras de Leticia, es una travesía que asumen para poder sacar adelante sus programas académicos.

Frente a este panorama, el Programa de Bienestar de la Universidad entregó 36 bicicletas a los estudiantes de posgrados y del Peama.

Desde la Institución se realizan apoyos en tres frentes: socioeconómico (alojamiento), alimentación y transporte. En esta oportunidad, con la entrega de las bicicletas, se fomentan los hábitos saludables y el disfrute del tiempo.

Con esta iniciativa, la Universidad se une a la apuesta de generar alternativas que incidan en la reducción de la contaminación en las ciudades y así mejorar la calidad de vida de las personas y aportar al cuidado del medioambiente.

Durante la jornada se realizó un taller de seguridad vial, se entregaron elementos de seguridad para el vehículo (seguro de bicicletas) y cada uno de los beneficiaros firmó el compromiso por la gestión de la movilidad.

El profesor Germán Ochoa, director de la Sede, afirmó que “con el incentivo del uso de las bicicletas se busca una correspondencia al mejoramiento de la malla vial de la ciudad de Leticia y así generar un mayor respeto de los vehículos motorizados hacia las personas que se van en bicicletas”.

Los estudiantes beneficiados con las bicicletas deberán prestar un servicio a la Universidad, de 16 horas durante el semestre, en la biblioteca, las salas de informática o en actividades puntuales.








miércoles, 19 de octubre de 2022

“Se puede vivir sin oro o sin carbón, pero no sin agua”: Pedro Arrojo, relator de la ONU

 Imaginar un mundo sin agua parece algo del futuro, pero es una realidad del presente: alrededor de 2.200 millones de personas en el mundo no tienen acceso a agua potable. Pedro Arrojo, relator especial sobre los derechos humanos al agua potable y al saneamiento, de la Organización de las Naciones Unidas, se reunió con organizaciones regionales y comunitarias defensoras de este derecho en el país para discutir la problemática y la resistencia en torno a esta.

Casi el 40 % de la población mundial sufre de falta de agua y más del 50 % (4.200 millones de personas) carecen de servicios de saneamiento gestionados de forma segura, según cifras de Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).

El profesor Gregorio Mesa, de la Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), director del Grupo de Investigación en Derechos Colectivos y Ambientales (GIDCA), le dio la bienvenida al relator Arrojo e hizo una breve introducción en la que planteó los retos a los que se enfrenta la humanidad, y en particular Colombia, por la gestión y gobernanza del agua.

Por su parte, Libardo León Pinzón, de la Red Nacional de Acueductos Comunitarios –articulación de asociaciones y redes de acueductos comunitarios que lucha por el fortalecimiento y reconocimiento de la gestión comunitaria del agua–, enfatizó en la importancia de estos espacios para las comunidades del país, que se encargan de aprovechar saberes ancestrales tanto indígenas como campesinos –desde La Guajira hasta Nariño– para proteger las fuentes hídricas para que sean el manantial para cerca de 11 millones de colombianos.

El relator Arrojo expresó que “en informes del año ya se hablaba de la necesidad de que la sociedad hiciera las paces con los ríos, de que debía haber una ingeniería natural que promueva la gobernanza del agua como un bien común y no como una mercancía, situación que se veía, por ejemplo, con que el agua se fuera a negociar en Wall Street”.

Agregó que el informe “Riesgos de privatización, financiarización y gestión”, presentado este año, señala que es clave construir una gestión comunitaria del agua que tenga como eje principal la participación tanto de las comunidades indígenas –quienes ven este recurso como el alma azul de la vida, que forma parte del territorio– como de las campesinas, que ayudan a que el agua se vea como un bien común, como un tesoro de la gobernanza democrática.

El derecho al agua y la resistencia en Colombia

Como parte de la visita del relator Arrojo se realizó un panel con expertos de organizaciones como el Comité por la Defensa y la Vida de Buenaventura, la Organización Sütsuin Jiyeyu Wayuu –o Fuerza y Mujeres Wayuu– y la Plataforma Colombiana de Derechos Humanos, Democracia y Desarrollo (PCDHDD).

En el evento, el sociólogo Andreiev Pinzón, del Comité de Buenaventura, dijo que “es increíble que el municipio tenga 9 cuencas hidrográficas, por las que fluyen alrededor de 10.000 m3 por segundo de este recurso, y la comunidad no tenga agua, lo cual es consecuencia de la gestión gubernamental enfocada a que el agua forme parte de proyectos para los muelles o los trenes, mas no para la población”.


Como parte de la conversación, el líder indígena Miguel Socarrás, de la comunidad wayuu, expuso la problemática de La Guajira señalando que cada año se usan alrededor de 30 millones de litros de agua en procesos de minería que afectan al río Ranchería, principal afluente de la región, y específicamente al arroyo Bruno, lo cual provoca que la comunidad tenga escasez del líquido vital.

Enfatizó además en que las actividades adelantadas por las multinacionales no están generando desarrollo, sino “des-arroyo”, refiriéndose a la destrucción del arroyo Bruno y las demás fuentes hídricas: “las empresas pueden producir petróleo, gas o muchos minerales, pero ninguna puede producir agua, porque esta solo la da la madre naturaleza”.

Aura Rodríguez, representante de la PCDHDD, expresó que algunos de los problemas más graves asociados con el agua en el país son su uso en la agroindustria, en productos como la caña de azúcar o las flores, además del fracking, las empresas de bebidas azucaradas, la generación de energía y electricidad, y el asesinato de líderes sociales.

Después de exponer las dificultades que trae esta situación, los panelistas expusieron algunas de las formas en que sus comunidades han estado resistiendo y protegiendo el derecho fundamental al agua.

Entre estas iniciativas se pueden destacar: el paro cívico realizado en Buenaventura en 2018, con el que se consiguieron recursos para crear empresas público-comunitarias para la gestión y gobernanza del agua; el diseño de políticas públicas en comunidades de Antioquia y Santander gracias a la Red Nacional de Acueductos Comunitarios; y la Sentencia de la Corte Constitucional de 2016, mediante la cual se reconoce al río Atrato como un sujeto de derechos.






miércoles, 5 de octubre de 2022

Paso aéreo para animales de Yotoco evitaría que sean atropellados

 Monos rojos aulladores, perros de monte, ardillas, osos perezosos, osos hormigueros o zarigüeyas ya pueden respirar un poco más tranquilos gracias al puente “peatonal” que se inauguró en la vía Buenaventura-Buga para evitar ser atropellados, y de paso impedir que mengüe la calidad de la Reserva Nacional Forestal Bosque de Yotoco (Valle del Cauca). La propuesta surgió de un grupo de estudiantes de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Palmira y su ejecución estuvo a cargo de Instituto Nacional de Vías (Invías).

El puente, de unos 25 m de largo y ubicado a una altura de 8 m, en una vía por donde transitan en descenso vehículos tanto de carga como de transporte público y de particulares, ayudará a mantener la conectividad entre especies y el intercambio genético de la fauna que habita en la Reserva, custodiada desde hace más de 60 años por la UNAL Sede Palmira.

En esta área de 559 hectáreas se encuentra uno de los epicentros de biodiversidad más importantes de país, que además del mono aullador, la pava caucana o la mariposa monarca, alberga el cedro amarillo y una gran variedad de orquídeas, que lo constituyen en un importante espacio para científicos, investigadores, docentes y estudiantes.

El Invías entregó el paso, cuya vida útil se estima en dos décadas, como parte de las compensaciones y actividades de manejo ambiental del Programa de Sostenibilidad que este organismo desarrolla dentro del proyecto “Atropellamiento de fauna”.

Según Valentín Hidalgo, encargado de la Reserva y funcionario de la UNAL, “la mortalidad más frecuente de animales sobre la carretera es de armadillos, perezosos, perro de monte y monos rojos aulladores, la especie más abundante reportada. En la última semana registramos el atropellamiento de cinco animales en la vía”.

La infraestructura busca facilitar el paso de los animales de una orilla a la otra, “por esos los colores del puente son similares a los que ellos observan en la naturaleza”, explica Martín Arrieta, biólogo de Servicios Geográficos y Ambientales (SIGGA), empresa contratista que desarrolló el proyecto.

Iniciativa de la UNAL

La idea de ubicar puentes especiales que sirvan como corredores biológicos en la Reserva Nacional Forestal Bosque de Yotoco nació de un grupo de estudiantes de las facultades de Medicina Veterinaria y de Zootecnia de las sedes Bogotá y Palmira, quienes alertaron y diagnosticaron la crisis de los atropellamientos.

Además han realizado varias campañas de capacitación en primeros auxilios para los habitantes de la zona, con el objetivo de que puedan ayudar en los primeros minutos de un accidente.

El profesor Carlos Jaramillo, director de Extensión e Investigación de la UNAL Sede Palmira, menciona que este trabajo participativo con las asociaciones comunitarias aledañas a la Reserva ha sido muy valioso, pues de una u otra manera ellas sirven como guardianas del bosque.

Iniciativa de la UNAL

La idea de ubicar puentes especiales que sirvan como corredores biológicos en la Reserva Nacional Forestal Bosque de Yotoco nació de un grupo de estudiantes de las facultades de Medicina Veterinaria y de Zootecnia de las sedes Bogotá y Palmira, quienes alertaron y diagnosticaron la crisis de los atropellamientos.

Además han realizado varias campañas de capacitación en primeros auxilios para los habitantes de la zona, con el objetivo de que puedan ayudar en los primeros minutos de un accidente.

El profesor Carlos Jaramillo, director de Extensión e Investigación de la UNAL Sede Palmira, menciona que este trabajo participativo con las asociaciones comunitarias aledañas a la Reserva ha sido muy valioso, pues de una u otra manera ellas sirven como guardianas del bosque.

Según el aplicativo Sukubun del Invías, sistema que registra los puntos de mayor accidentalidad de fauna atropellada, este punto es uno de los más críticos de la región.

Además del puente, como parte de la compensación también se adelantó el proyecto “Escuelas verdes”, que consistió en el embellecimiento de las nueve instituciones educativas ubicadas alrededor de la Reserva Forestal del Bosque de Yotoco, en un trabajo mancomunado entre estudiantes y las comunidades de la zona.

 






lunes, 3 de octubre de 2022

Energías solar y eólica, esenciales en el cambio de modelo energético de Colombia

 En esta idea coincidieron hoy los expertos nacionales e internacionales invitados al Summit Académico “Megatendencias de la Industria 4.0: hacia una transición inteligente”, organizado por la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) en el marco de la Feria Internacional Industrial de Bogotá (FIB).

El tema energético y el medioambiente, además de la transición energética y el desarrollo sostenible en Colombia, fueron algunos de los aspectos en torno a los cuales disertaron los profesores Javier Solano y Fabio Sierra, de la Faculta de Ingeniería de la UNAL, y Alain Clappier, de la Universidad de Estrasburgo (Francia), en compañía de José Salamanca, consultor técnico comercial de la compañía Robert Bosch, y Erik Høeg, embajador de Dinamarca en Colombia.

El profesor Chappier reflexionó acerca del cambio que se podría hacer en Colombia: “es necesario cuantificar el potencial energético del país, ya que existe una oferta importante de energías solar y eólica, que aunque al inicio pueden tener un costo elevado, llegarían a ser una fuente importante y sólida a futuro”.

Con respecto a las potencialidades del país en energías renovables, el profesor Sierra manifestó que, “si se mira la costa norte, lo más probable es que debamos enfocarnos mucho hacia la energía eólica y solar, mientras que en la zona pacífica, muy posiblemente debemos pensar en las pequeñas centrales hidroeléctricas, en vez de grandes, para disminuir la afectación ambiental; y por otro lado, si vamos a la Orinoquia, podemos aprovechar los caudales de los ríos para implementar turbinas hidrocinéticas”.

Agregó que el reemplazo del gas natural también se puede evaluar y hacer por medio de energías renovables, con tres métodos: con gas de síntesis, que se da por una transformación termoquímica de la materia orgánica dejada por las plantas (biomasa); con biogás, que se puede producir con los residuos de la industria agropecuaria en los rellenos sanitarios, por ejemplo; y con hidrógeno, que se consigue mediante electrólisis, que separa la molécula del agua (H2O) para aprovechar los gases necesarios.

Por su parte, el experto de la industria automotriz, José Salamanca, al referirse al uso de carros eléctricos, expresa que “mientras en el país se venden un 90 % de vehículos con motores de combustión interna con gasolina o diésel, solo hay alrededor de un 4 % de vehículos eléctricos, lo cual obedece a la dificultad y demora para cargar las baterías, lo que hace inviable viajar largos trayectos, por ejemplo de Bogotá a Santa Marta.

Añade que los carros híbridos, o sea con motor de combustión y al mismo tiempo eléctricos, son una alternativa que ha estado tomando fuerza, ya que hacen mucho más sencillo el proceso de carga y permiten disminuir las emisiones de gases contaminantes.

Aportando a la discusión, el embajador Høeg ofreció su punto de vista desde el ámbito gubernamental, dando luces sobre la posibilidad de que se den alianzas entre lo público y lo privado para trabajar conjuntamente en reemplazar las energías contaminantes que utilizan petróleo, para beneficiar al medioambiente y a toda la sociedad.

Academia e industria

La charla de apertura de la primera jornada del Summit Académico se centró en el tema energético y el medioambiente, y estuvo a cargo del profesor Solano, socio de negocios (business partner) digital sénior de Ecopetrol.

El experto ofreció cifras fundamentales acerca de lo que está pasando en el mundo con el cambio climático, ya que las ciudades, que abarcan alrededor del 2 % de la superficie de la tierra, consumen cerca del 78 % de la energía mundial y producen más del 60 % de los gases de efecto invernadero (GEI).

Algunos de los efectos del cambio climático más relevantes son: el hielo que se derrite cada vez más rápido, un aumento de 3,2 mm del nivel del mar cada año, los incendios, la escasez de agua y la pérdida de cosechas, entre otros.

“El cambio climático es real y el estilo de vida actual es insostenible: el 1 % de la población más rica está produciendo más GEI que el 50 % más pobre; además, los combustibles y la industria alimentaria es responsable del 50 % de emisiones de GEI, y de más del 90 % de la pérdida de biodiversidad”, aseguró.

Este evento también tendrá actividades este viernes 30 de septiembre, último día de la Feria, con conversatorios alrededor de temas como la fabricación inteligente y sostenible, y territorios inteligentes en los ámbitos rurales y urbanos. Los estudiantes de la UNAL pueden entrar gratis presentando su carné.