Una encuesta de percepción a 200 representantes de organizaciones comunitarias y de agricultores, de entidades públicas y de la academia, arrojó que el 84,8 % de los consultados asoció la degradación de los bosques tropicales del país con la extracción ilegal de madera, el pastoreo, los incendios forestales y la presencia de especies invasoras, mientras el 15,17 % lo atribuyó a impulsores indirectos económicos como los incentivos nacionales para el manejo de las tierras.
Otro resultado del estudio, adelantado por el grupo de
investigación Ecología del Paisaje y Modelación de Ecosistemas (Ecolmod), de la
Universidad Nacional de Colombia (UNAL), es que en todas regiones los
participantes locales percibieron mayores cambios en los bosques en la última
década, lo que ha incrementado, por ejemplo, los incendios forestales y las
especies invasoras; en la Amazonia y el Pacífico se destacaron la extracción
ilegal de madera con fines de comercialización; y en la región Orinoquia la
extracción con prácticas poco sostenibles de madera con fines de subsistencia.
La degradación forestal es un proceso de cambio generado por
el hombre que afecta de manera negativa las características del bosque, como su
estructura forestal, las funciones, los procesos ecológicos y su calidad, por
lo que es difícil percibirlo a simple vista.
La ingeniera forestal María Constanza Meza, integrante de
Ecolmod y quien participó en el estudio, señala que “la extracción excesiva de
leña, carbón o resina mediante prácticas poco sostenibles, la construcción de
carreteras, la minería a cielo abierto y el pastoreo de ganado en bosques
contribuyen a la degradación”.
Cabe anotar que el objetivo de desarrollo sostenible número
15 de Naciones Unidas hace referencia a la conservación y sostenibilidad de los
bosques mediante la disminución de la deforestación y la recuperación de los
bosques degradados, con el fin de preservar la vida de las especies y aumentar
la biodiversidad.
Resultados
La investigación demostró que “la mayoría de los actores de
las regiones Andina, Pacífica, Caribe y Amazonia coincidieron en que la tala
ilegal y persistente de madera para usos comerciales es una causa importante de
la degradación forestal; sin embargo, en la Región Orinoquia, en donde es mayor
la tala insostenible con fines de subsistencia, los trabajadores encuestados no
lo consideran así”.
Por otro lado, en la Región Amazónica los actores nacionales
percibieron un mayor impacto de la tala ilegal, el pastoreo en bosques, el
fuego y las especies invasoras.
“Los hallazgos refuerzan la necesidad de promover mejores
prácticas tanto locales como nacionales para reducir las presiones que ejercen
sobre los bosques la extracción ilegal de madera, el pastoreo en áreas de
bosque y los incendios, para así revertir la degradación forestal y aumentar la
calidad de vida de los colombianos”, enfatiza la ingeniera Meza.
Agrega que “se necesita una legislación forestal que
contemple la amplia variedad de tipos de bosques y prácticas de manejo
diferenciales en todas las regiones naturales del país, y que ofrezca una
orientación a la gestión del recurso forestal”.
“Para ello, es importante aplicar los principios generales
de la gobernanza, que involucre y considere la percepción y participación de
todas las partes interesadas de forma receptiva, inclusiva y representativa,
para así cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible”, enfatiza.
Importancia del cuidado
La investigadora recuerda que un bosque degradado es menos
productivo porque pierde su biodiversidad, procesa menos bióxido de carbono y
está expuesto a perturbaciones, como por ejemplo los incendios.
“La deforestación se refiere a la tala de un bosque, eliminándolo
por completo para darle otros usos a la tierra, y cuando un bosque se degrada
significa que aún existe, pero ya no funciona bien”, menciona.
Se estima que en todo el mundo el 70 % de los bosques están
sujetos a los efectos de la degradación, reduciendo su biodiversidad hasta en
un 75 %.
Los resultados de la investigación se publicaron en la
revista científica Ambios, consulte el texto aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario